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Proteja su agua de fracturación con la gestión del almacenamiento de agua de TETRA

Tratamiento del agua: Los (muy) primeros años

Con la llegada de la fracturación hidráulica, el almacenamiento, el tratamiento y el mantenimiento de grandes volúmenes de agua se han convertido en un componente importante de las operaciones en el lugar de trabajo. El agua de fracturación suele almacenarse en tanques sobre el suelo o, más comúnmente, en estanques subterráneos (o pozos de agua) equipados con revestimientos. Sin embargo, el almacenamiento de grandes volúmenes de agua supone un reto.

Las antiguas civilizaciones se dieron cuenta hace siglos de que el agua almacenada a largo plazo se vuelve inadecuada para el uso humano, aunque no sabían nada de la ciencia de los patógenos transmitidos por el agua. De hecho, es probable que el vino sea el primer tratamiento del agua inventado por el ser humano. En las antiguas civilizaciones de la región mediterránea, el agua para el consumo solía cortarse con vino porque su nivel de alcohol (ligeramente superior al 10-14% de los vinos modernos) estaba casi precisamente en el punto que mata las bacterias, lo que hacía que el agua fuera segura.

Bacterias: No es sólo un problema del agua potable

Al igual que el agua potable, el agua de fracturación también debe ser tratada adecuadamente para evitar la proliferación de bacterias. Con la capacidad de proliferar a un ritmo rápido, las bacterias reducirán los sulfatos en el agua, creando así el peligroso gas de sulfuro de hidrógeno (H2S), así como sólidos de sulfuro de hierro. Estos últimos pueden dañar gravemente la porosidad de un yacimiento y, en consecuencia, disminuir la producción si se bombea a un pozo.

La necesidad de gestionar el almacenamiento de agua

A pesar del potencial de crecimiento bacteriano, la gestión adecuada de los estanques de almacenamiento de agua de fracturación es un componente de las operaciones a menudo infravalorado. En realidad, la gestión adecuada de los estanques es una medida preventiva sólida que requiere una inversión mínima y que suele consistir en el tratamiento del agua con un biocida, la aireación y un producto químico para promover la separación de los sólidos. Descuidar la gestión de las balsas conducirá invariablemente a una reparación más costosa en el futuro.

Directrices de gestión del almacenamiento de agua de TETRA

Tratamiento de aguas

El primer paso de la gestión del estanque es el tratamiento del agua, que comienza con la determinación de los niveles de oxígeno disuelto (OD), potencial de oxidación-reducción (ORP) y trifosfato de adenosina (ATP), un compuesto orgánico que alimenta el crecimiento de células vivas como las bacterias. A continuación se aplica un tratamiento de choque inicial con hipoclorito de sodio (lejía), que suele ser del 12,5% en volumen, pero que varía en función del nivel de ATP. A continuación, un tratamiento de larga duración con cloruro de dimetil dialquil amonio (DDAC) proporciona una desinfección adicional, así como la separación de sólidos. Cada tratamiento debe ir acompañado de una aireación para mezclar bien el agua y los aditivos químicos. Si un estanque carece de sistema de aireación, puede utilizarse una bomba de transferencia para "hacer rodar" el agua.

Mantenimiento semanal

Cada semana, un técnico debe registrar el nivel, la temperatura y el aspecto del estanque, así como recoger muestras de cuatro puntos equidistantes a lo largo del perímetro. Entre los descriptores habituales del aspecto se encuentran el transparente, el blanco lechoso, el blanco opaco, el verde teñido, el marrón teñido y el negro. En el registro semanal debe anotarse también si el estanque se ha aireado (o "rodado") en el momento de la recogida de la muestra o en torno a él.

Mantenimiento semanal del estanque

Análisis de muestras de agua

Lasmuestras de agua deben ser analizadas cada semana para determinar los niveles de DO y ORP. Si el ORP cae por debajo de 50 milivoltios, la muestra debe analizarse más a fondo para determinar el nivel de ATP. De lo contrario, las muestras para el análisis de ATP pueden recogerse cada dos semanas en lugar de cada semana. Si el nivel de ATP supera los 10.000 picogramos por mililitro, debe aplicarse una dosis de 30 partes por millón (ppm) de DDAC activo al 80% para mantener la calidad del agua.

Aireación del estanque

El medio más eficaz para airear un estanque grande es utilizar un sistema de aireación subsuperficial para introducir aire difuso directamente en el agua. A diferencia de los aireadores de superficie y las fuentes, la aireación subsuperficial crea el mayor contacto entre el aire y el agua, la circulación y la mezcla, y provoca la menor evaporación. Como ya se ha dicho, si el estanque carece de un sistema de aireación, se puede utilizar una bomba de transferencia para "hacer rodar" el estanque, pero esto no es lo ideal.

La aireación suele realizarse una o dos veces cada 24 horas, dependiendo de la temperatura del agua y de las condiciones meteorológicas locales. Los climas más cálidos pueden requerir que el sistema de aireación funcione de forma continua, pero hay que tener cuidado en este caso porque demasiado aire puede hacer que el estanque se vuelva turbio. TETRA recomienda mantener un nivel mínimo de OD de 2-4 ppm para evitar el crecimiento bacteriano; es preferible mantener niveles más altos si es posible.

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